El Cardiff City, que parecía condenado a un descenso sin remedio, está enzarzado en la salvaje lucha por la permanencia con equipos como el Southampton, Burnley o Brighton and Hove Albion. Han conseguido llegar hasta esta parte de la temporada vivos gracias a la fortaleza mental.
La importancia de Neil Warnock
Al inicio de temporada, con una plantilla muy limitada, parecía que le faltaría fuelle para disputar la salvación.
Pero Neil Warnock ha demostrado por enésima vez que, pese a su edad, sigue siendo un estratega y comunicador como pocos en el fútbol inglés. Ya el año pasado consiguió un ascenso con este mismo equipo sorprendente. Y no contento con eso, está manteniendo en la lucha a su equipo. Ha sabido comunicar muy bien su mensaje, una defensa junta y con bloque bajo, para salir a la contra velozmente. No en vano le han apodado “Neil Guadiolack”.
En este sistema juega un papel muy importante Víctor Camarasa, que es de los pocos que aporta calidad técnica al conjunto galés. El jugador cedido del Betis, está despuntando en los bluebirds y ha demostrado su talento en la medular. Lo ha logrado pese a estar en un equipo dónde el centro del campo es la zona menos importante de todo el sistema.
Problemas y más problemas para el Cardiff City 2018-19
Tenemos que tener en cuenta también, la corta plantilla de la que dispone los de la capital de Gales. Solo hace falta mirar el delantero centro titular del equipo, Callum Patterson. El escocés, aunque juega de ariete, es realmente lateral derecho. Además, uno de los líderes del equipo, Sol Bamba, se perderá lo que resta de temporada por lesión.
La gota que colmó el vaso fue cuando el club logró firmar tras mucho esfuerzo a un delantero prometedor. Ese jugador era Emiliano Sala. Todos sabemos la tragedia que ocurrió y el mazazo tremendo que sufrió todo el mundo del fútbol y el Cardiff.
La lucha no ha acabado
Entonces, ¿cómo puede ser que un equipo con una plantilla muy corta, jugadores importantes lesionados, una propuesta futbolística que se basa en que un lateral derecho baje los melones que le envía la defensa y un golpe emocional tan duro como el que fue la tragedia de Emiliano Sala, sigan en plena lucha por la salvación? Pues, como todo en la vida, es cuestión de mentalidad.
Y es que el Cardiff 2018-19 no ha bajado los brazos nunca, ni en las situaciones más complicadas. No se les puede achacar que hayan dejado de creer, porque no lo han hecho. Por mucha técnica que tengas, si la mentalidad del equipo no es buena costará mucho sacar buenos resultados.
El Fulham es un claro ejemplo de lo que puede llegar a afectar la mentalidad a un equipo. Los cottagers son el antónimo del Cardiff, una inversión económica brutal, jugadores de calidad, pero sumidos en una espiral de negativismo y pesimismo los han llevado a decir adiós de forma casi definitiva a la Premier League. Pero con una mentalidad tan fuerte como la del Cardiff no hay nada que no pueda hacer. Incluso salvar la categoría en estas circunstancias tan graves.
Quedan 8 jornadas para acabar la temporada y el Cardiff seguirá con los brazos en alto hasta el final. Y si desciende, puede seguir con los brazos bien arriba. Llegar hasta aquí ya es digno de estar orgulloso de ello.