La Segunda División B del fútbol español es una de las categorías más complicadas. Para el que os escribe la Segunda División B es quizás la división más bonita para seguir. Es el fútbol a la «vieja usanza». Campos humildes, terrenos de juego imperfectos, equipos parejos, ese aroma al fútbol que practicamos desde benjamines hasta juveniles. Por geografía, en mi caso, sigo bastante el grupo primero de dicha división y en consecuencia a los equipos gallegos, bendita TVG2. Ya sea por televisión o, por suerte, in situ en los campos tengo ese placer. En la Segunda B siempre hay jugadores interesantes. Jugadores con calidad para jugar en divisiones superiores pero que por unas cosas u otras no han podido lograrlo. Hoy hablaré de cómo juega Borja Iglesias, un jugador que me tiene enganchado y que explotó sus cualidades en dicha división.
Equipos de Borja Iglesias
Borja Iglesias, de Compostela, salió de la cantera del Villarreal, previo paso de Valencia y La Roda. Retornó a Galicia allá por verano de 2013. Gran parte de su corta carrera la labró en el filial del Celta de Vigo. Allí, Borja Iglesias, no tardó en despuntar. Siempre logró el doble dígito de goles salvo en su primera temporada. La de su total explosión, temporada 2016-2017, acabó con cifras estratosféricas. Anotó 34 goles en 39 partidos logrando también algo histórico para el filial del conjunto vigués, jugar la fase de ascenso a segunda división.
Varias temporadas de crecimiento incluida la de su explosión no le sirvieron al bueno de Borja para tener su gran chance en el primer equipo del Celta de Vigo. Durante su estancia en la ciudad de Vigo apenas disputó un puñado de minutos repartidos en dos partidos, uno de liga y otro de copa, con los «mayores» celestes. ¿Qué más necesitaba Borja para jugar en primera división con el Celta? Buena pregunta. No sabiendo qué hacer con él acabó cedido en el Zaragoza. Borja Iglesias había subido un escalón e iba a probar toda su calidad en la segunda división española. Su temporada con los maños fue enorme. Debutante en la categoría, Borja marcó 22 goles en liga repartiendo 6 asistencias en la misma. Clave para que el Zaragoza jugase fase de ascenso aunque finalmente no consiguieran el objetivo de ascender.
El Espanyol y su gran oportunidad
Tras aprobar con sobresaliente su estancia en la división de plata del fútbol español para Borja Iglesias llegaba el momento de dar el salto definitivo, jugar en primera división. Todos, incluidos el que os escribe, pensábamos que sería al fin en el Celta de Vigo pero no fue así. Tuvieron mucho tiempo para asegurarse la estancia del compostelano pero cuando realmente quisieron dar el paso era tarde. Borja buscó nuevos retos cuando el Espanyol pagó su cláusula, 10 millones de euros, y se convirtió en el fichaje más caro en la historia de los pericos. Allí ha comenzado a escribir un nuevo capítulo de su trabajada y corta carrera.
Cómo juega Borja Iglesias
Alto, mide 1.87, y corpulento, pasando los 85 kilos de peso pudiera parecer que Borja Iglesias es el típico delantero estático de área que se veía, y mucho, antaño. Sin embargo todo lo respecto a su físico es engañoso. Borja Iglesias pese a su corpulencia es un delantero en cierta manera rápido al que le gusta jugar al espacio y que lee a la perfección los desmarques. Su físico le permite jugar sin miedo al contacto siendo complicado defenderle y ganando mayormente la batalla en el cuerpo contra cuerpo.
Técnicamente no está exento de calidad. No es un jugador extremadamente habilidoso en el regate pero por físico y potencia supera a sus rivales con cierta facilidad. Tiene un buen control y a su vez también un buen primer toque. Esto, le permite descargar el balón rápidamente y buscar el espacio para continuar la jugada. Cara a portería despliega sus mayores virtudes. Gran golpeo de balón con ambas piernas siendo especialmente letal dentro del área y a media distancia.
El gol es su seña de identidad pero tácticamente Borja Iglesias tiene muchas cosas que mostrar. Un jugador que se adapta a muchos contextos ya sea de su propio equipo o del propio rival. Siendo un nueve no le gusta jugar en estático. Una de sus virtudes es su capacidad de saber cuando ser referencia y cuando caer a banda para dar profundidad a su equipo y atacar al rival desde los espacios. Todo esto le hace un delantero atípico que domina casi todas las facetas en los últimos 30 metros de campo. Un delantero con más de 100 goles en su carrera la cual aún no ha llegado a su apogeo.
Yo pensaba que lo habían traspasado,vigilaré al Zaragoza,a lo mejor con este vuelven a 1º y todo.
Traspasarlo, a mí modo de ver, hubiese sido un gran error. De hecho, considero que Borja merecía su oportunidad en el 1º equipo. Veremos como le va en el Zaragoza, ojalá lo rompa.
Yo igual,ya me parecía muy precipitado hacer eso,pues lo dicho,a vigilar a los maños.