De’Aaron Fox ya no es un novato

Los Sacramento Kings han firmado una gran temporada regular. El conjunto entrenado por Dave Joerger fue visto como un equipo de Playoffs durante gran parte de la temporada. Muy por encima de lo esperado, de la mano de De’Aaron Fox.

Parece que este proyecto empieza a ver la luz al final del túnel. Algo que, tras doce cursos sin pisar la postemporada, es muy necesario. Y algo que no podrían estar consiguiendo sin la inestimable aportación de De’Aaron Fox, junto con Marvin Bagley, el gran diamante de los Kings.

La llegada de De’Aaron Fox a la NBA

El 22 de junio de 2017, la franquicia californiana apostó por Fox con su elección número cinco del Draft. Llegó a la liga siendo un jugador muy talentoso y competitivo, pero con mucho por mejorar. Su único año en Kentucky fue realmente bueno, pero la NBA iba a ser muy exigente. En su temporada de novato se convirtió en el base titular de Sacramento y dio muestras de un gran potencial. Rindió a un buen nivel, pero no pudo entrar en ninguno de los dos All-Rookie Teams. Sin embargo, este año ha empezado lo mejor posible y ha demostrado ser uno de los sophomores (jugadores de segundo año) que ha dado un mayor salto de calidad.

El 1 de noviembre de 2018, De’Aaron Fox completó su primer triple-doble en la NBA con 31 puntos, 10 rebotes y 15 asistencias. Esto solo es la confirmación de su notable mejora con respecto a su año rookie.

Cómo juega De’Aaron Fox

El exjugador de Kentucky se ha consolidado como uno de los líderes del equipo. Está jugando, anotando y asistiendo más que la pasada temporada. Además, está lanzando más tiros y con una efectividad mucho mayor. También está defendiendo a un gran nivel y está imprimiendo un ritmo mayor al juego de su equipo, ya que se encuentra muy cómodo en situaciones de transición.

Lo más positivo de la mejora de Fox es, precisamente, que sigue teniendo un enorme potencial. Cumplidos los 21 años, acaba de completar su segunda temporada en la NBA. Además, también tiene la oportunidad de crecer en un equipo cuya principal prioridad reside en el desarrollo de sus jóvenes promesas y no en la necesidad de obtener una buena plaza para los Playoffs. Oportunidad que no han tenido otros jugadores de su camada, como Fultz y Ball.

Por supuesto, la suerte va a influir mucho en la carrera de De’Aaron Fox. Pero, de momento, todo parece ir en el buen camino. Ya se ha adaptado a la liga, está mejorando considerablemente y es una pieza vital de la franquicia en la que juega. En Sacramento confían mucho en él. Y parece que él también. Esta temporada ha demostrado que está preparado para brillar.

Crecer y competir, las dos cosas a la vez, lo llevarán a madurar como jugador rápidamente. Y, quién sabe, si también lo llevarán a convertirse en uno de los dominadores de este deporte. El tiempo hablará, pero es innegable que Fox ya está dando sus primeros pasos hacia el estrellato.

Estadísticas de De’Aaron Fox

  • Temporada 17-18: 11,6 puntos – 2,8 rebotes – 4,4 asistencias – 41% TC – 31% T3
  • Temporada 18-19: 17,3 puntos – 3,8 rebotes – 7,3 asistencias – 48% TC – 37% T3

Lee más artículos míos aquí.

Deja un comentario