La historia del megatraspaso Nets Celtics
Tras analizar qué podría haber pasado si Shaquille O’Neal hubiese continuado más años en los Lakers, llega el turno de ¿»Y si… los Nets no hubieran dado todos sus picks futuros de Draft por 3 jugadores que superaban los 30 y tantos?»
Nos situamos en mayo de 2010. Un magnate ruso aterriza en el JFK (el aeropuerto de NY) con una maleta repleta de dinero (y malas decisiones), y comienza a buscar lugar en el que quedarse, escogiendo Nueva Jersey, escogiendo a los Nets. De esta forma, se convierte en el primer propietario no-estadounidense de una franquicia NBA en toda la historia de la competición (remontándonos hasta los años 40, en 1946). Dos años más tarde, vuelve a hacer la maleta, pero para llevarse a sus Nets al otro lado del Hudson, más concretamente al barrio de Brooklyn, donde se había estado construyendo el Barclays Center, el «mejor pabellón de USA» (o así es como se le conoce).

Tras caer en la primera ronda de los PlayOffs de ese año, Projorov decide dar un golpe en la mesa (y en los despachos) y demostrar que no le importa el riesgo, si implica un éxito con posibilidades de alcanzar. En julio de 2013 se hace oficial esta declaración de intenciones: los Nets envían a Boston a Gerald Wallace, Bogans, Humphries… y 4 rondas de Draft (empezando así su reconversión en lo que serán hoy en día, y lo que, probablemente, llegarán a ser) y reciben a Paul Pierce y a Kevin Garnett, además de a Jason Terry, a cambio. A finales de la década de los 2000, este habría sido el movimiento de la década, o del siglo; ¿en 2013? Un fichaje de dos jugadores de 35 y 37 años respectivamente que estaban comenzando sus temporadas de jubilación, dando los últimos coletazos de sus carreras.

Viendo la historia en perspectiva, es normal lo que hizo Prójorov: montó un «súperequipo» (con más que dos simples comillas) para competir en ese momento, hipotecando su futuro. A algunos equipos les sale bien; a él, la historia dice claramente que no: dos apariciones en PO en las que el mayor logro fue perder en Semifinales de Conferencia, un récord negativo de victorias del 25% en los últimos dos años con 41 partidos ganados de 164 jugados, y un futuro muy incierto, siendo una de las peores franquicias de la NBA (si no la peor) y que menos mejoría tiene prevista.
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Las consecuencias del Megatraspaso Nets Celtics
Pero no vamos a criticar más la decisión, vamos a ver lo que habría podido pasar si no se hubiera dado este caso. Si los Nets se hubiesen quedado las rondas de Draft, habrían escogido alto en el Draft de 2014 (Jabari Parker, Wiggins, Embiid, Exum…) pero puede que no lo hubiesen hecho en 2016, este año o, probablemente, el año que viene. Es más, en 2014, fue la elección propia de los Celtics la que quedó en el top-5, con la que escogieron a Marcus Smart, futuro base superestrella de la franquicia. El año pasado los Celtics escogieron a Jaylen Brown, para sorpresa de la gente, y este año, aún habiendo logrado el pick número 1, lo mandaron a Philadelphia (donde escogieron, sabiamente, a Markelle Fultz) a cambio de la 3º elección (que fue Jayson Tatum) y de la primera ronda del año que viene. Parece que Danny Ainge está obsesionado con el futuro. Normal, muy difícil competir con GSW, Cleveland… hoy por hoy.

Las cosas como son: Brooklyn podría tener ahora mismo una plantilla que fuera un más que probable contender al campeonato en un par de años, y al que los FA verían con buenos ojos, y no el «vertedero» de la NBA al que van los jugadores a acabar sus carreras (Scola, Bennett, J-Lyn…) y en el que parece estar perdido D’Angelo Rusell (ojalá funcione y le calle la boca a Magic), Hollis-Jefferson o (antes, por suerte ha visto la luz californiana al final del túnel) Brook Lopez. En cambio, Boston podría no tener el futuro que tiene ya que un suceso podría haber cambiado toda esta historia.
Un mes antes del comienzo de la debacle de Brooklyn, los Clippers (a los que había llegado Doc Rivers a finales de junio) ofrecieron a DeAndre Jordan a cambio de Kevin Garnett, oferta que Rivers anuló. Si esto llega a pasar, no se habría dado el mega-traspaso a Brooklyn y los Celtics no tendrían las posibilidades de futuro que tienen. O sí. Depende de como hubiera encajado DeAndre en la dinámica de los de Massachusetts.

Eso sí, para acabar, y suponiendo y poniendo en hipótesis muchas condiciones para que esto se diese, los Celtics podrían tener a Jordan en este momento. Dejo para que lo penséis… ¿habrían eliminado a los Cavs en las últimas Finales de Conferencia del Este con DeAndre e Isaiah sano? Nunca se sabrá, igual que nunca se sabrá qué habría podido ser de los Nets con todas esas rondas de Draft, tan sólo el tiempo dirá quién es el vencedor (que ya parece evidente) y quién el vencido.