Anelka, Amunike, Hagi… Top-10 jugadores infravalorados

Hoy vamos a hacer un repaso de los 10 jugadores más infravalorados de la historia del fútbol. Pero con un matiz muy especial. Porque nuestros protagonistas de hoy no solo es que fueran poco valorados. Lo cierto es que muchos de ellos fueron objeto de burla entre los aficionados. Se ganaron una fama de malos muy alejada del rendimiento que realmente dieron.

¿Te acuerdas de lo malo que era Fulanito? ¿Cómo pudo llegar a jugar Pepito aquí? Casos hay a montones pero… ¿son todos ellos reales? ¿Son recordados pésimamente de manera injusta? En el fútbol, como en la vida, todo es opinable, pero mi respuesta es: sí.

Top-10 jugadores más infravalorados de la historia

Muchos de ellos no sólo no eran unos tuercebotas, sino que además fueron auténticos jugadorazos que, por desgracia, no tuvieron toda la suerte deseable en una etapa muy concreta de sus carreras. A algunos les faltó trabajo, a otros una gotita de esa pócima esencial que es el talento… y a otros simplemente les pudo la presión.

10. Jordi Cruyff

Su presencia en la lista era casi obligada porque nadie de los que le haya visto jugar puede pensar que fuese un mal jugador de fútbol. La sombra alargada de su padre y las excesivas expectativas creadas en torno a su figura hacían casi imposible que su buena carrera recibiese los méritos que se merecía.

Jugador muy técnico, con una buena zurda que se movía bien en tres cuartos de campo y que fue parte fundamental del histórico Alavés que a punto estuvo de ganar la Copa UEFA 2001.

Johan Cruyff junto a su hijo Jordi.

En sus primeros años de carrera, se le esperó como a uno de los elegidos, pero pese a ser un jugador de calidad nunca estuvo a la altura del gran Johan Cruyff. Tras salir del Barça se enfundó por cuatro años la elástica del Manchester United de Sir Alex Ferguson y pese a empezar bien (dos goles en sus dos primeros partidos) su paso por las islas estuvo marcado por sus constantes lesiones, algunas graves, que le restaron continuidad.

Tras compartir vestuario con Javi Moreno, Cosmin Contra u Óscar Téllez en el Deportivo Alavés, marchó al Espanyol, para acabar su carrera en Ucrania y Malta. Quizá perdió parte de su carrera buscando la gloria en clubes de primerísimo nivel en los que le faltó suerte y quizás un poco de talento. Pero jamás fue un jugador semiprofesional como se insinuaba en la época.

9. Cristiano Lucarelli

Lo cierto es que no llegó a convertirse nunca en el nuevo Christian Vieri, como auguraban los expertos, pero Lippi le hizo debutar en la selección en 2004, disputando un total de 4 partidos en los que anotaría tres goles. Uno de los jugadores más infravalorados de la historia, sin duda.

Llegó a Valencia a finales de los 90 apodado como el “Toro” de Livorno, siendo la gran esperanza a medio plazo de Italia para ocupar algún día el preciado lugar de delantero centro de la azurra. A los pocos meses se vio que Lucarelli no estaba preparado para tal reto, por lo menos tan joven.

Su exceso de peso y los métodos exigentes de su entrenador, Claudio Ranieri, acabaron por relegarlo a un segundo y tercer plano. Todavía se recuerda su nefasto paso por Mestalla. Sin embargo, tras salir del club ché su carrera logró coger un nuevo vuelo, hasta el punto de ser considerado uno de los clásicos goleadores de Italia en la siguiente década.

Lucarelli celebra un gol con el Livorno.

En el Lecce logró 27 tantos en 59 partidos y con el Livorno logró ser el capocannoniere de la Serie A en la temporada 2004-2005. Un hito histórico por la poca entidad del club en cuestión y por tratarse del equipo de su corazón.

8. Sebastián «Loco» Abreu

Seguramente el uruguayo es el jugador que ha pasado por más clubes profesionales en la historia del fútbol. Sin embargo, en nuestro fútbol, a pesar de su decente paso por la Real Sociedad, se le recuerda muy especialmente por su primera etapa en el Deportivo de la Coruña, donde coincidió con otros jugadores que perfectamente habríamos podido citar en esta lista de jugadores más infravalorados de la historia, como Moustapha Hadji o Salaheddine Bassir.

Perteneció al club gallego seis temporadas, pero nunca formó parte de su plantel excepto en la primera. Lo cierto es que su fortuna de cara al gol fue escasa, tres goles en cinco partidos, además de ahondar en la fama que traía de jugador extravagante y polémico. No dejó mucho más que una extraña celebración de un gol frente al F.C. Barcelona (ver vídeo).

Sebastián Abreu es uno de los jugadores más infravalorados de la historia

Sebastián Abreu fue puro fútbol uruguayo: constancia, agresividad y goles. Sí, muchos goles. Nunca fue un delantero preciosista ni tuvo la gracia de otros compatriotas suyos como Diego Forlán o Luis Suárez, pero era un atacante muy aprovechable gracias a sus más de 1,90 de altura y a su buen remate de cabeza.

En su dilatada carrera cabrá destacar siempre dos episodios: el gol de Abreu (que nunca fue gol) y el penalty a lo panenka que daría a Uruguay el pase a las semifinales del Mundial 2010.

7. Dejan Petkovic

Su paso por la liga española no puede calificarse de otro modo que no fuese ruinoso. El Real Madrid le pagó al Estrella Roja de Belgrado 500 millones de pesetas para conseguir su fichaje. Por aquel entonces, el serbio ya era capitán de su club y pese a su juventud se le veía una gran personalidad, además de poseer un buen golpeo de balón.

Vista su poca aclimatación el Madrid lo cedió al Sevilla, donde no cuajó. Capello dijo públicamente que “no tenía la calidad suficiente para jugar en el Real Madrid” y lo sentenció. Meses antes, había pegado un puñetazo a Pesaresi (Sampdoria) en  el túnel de vestuarios, lo que le costó al club blanco una considerable multa.

Hasta aquí todo paja, pero la historia de Petkovic daría un giro de 180 grados, hasta el punto de convertirse en el jugador extranjero con más partidos en la Liga Brasileña y en uno de los jugadores más infravalorados de la historia.

En el Flamengo se ganó el honor de llevar el 10 del mítico Zico, convirtiéndose en una de las leyendas de aquel equipo merced a sus buenas actuaciones y lanzamientos de falta e incluso algún que otro gol olímpico (ver vídeo). Un jugador de una calidad desbordante cuyo paso por España no hace justicia a su carrera.

Dejan Petkovic festeja un gol con el Flamengo.

6. Freddy Rincón

Primer jugador colombiano en la historia del Real Madrid, que lo firmó procedente del Nápoles italiano por unos cuatro millones de euros a petición de Jorge Valdano. Su estancia en la capital de España rayó entre la indiferencia y la mediocridad, pues nunca formó parte de las preferencias de su nuevo técnico, Arsenio Iglesias, que lo relegó rápidamente al banquillo.

Rincón era un centrocampista adelantado a su tiempo, con una buena calidad técnica y un físico imponente que nunca llegaría a ser aprovechado en el club merengue. Una vez concluyó su etapa madridista, todo fueron alegrías para el bueno de Freddy, que se hizo un nombre en el fútbol brasileño donde jugó durante siete años.

A día de hoy es recordado como uno de los mejores extranjeros que han pasado por el Brasileirao y uno de los grandes de la historia del Corinthians, club que logró sacar su mejor rendimiento. Está claro que fue uno de los jugadores más infravalorados de la historia.

Freddy Rincón posa con la camiseta del Real Madrid.

Top-5 jugadores más infravalorados de la historia

5. Nicolas Anelka

El Real Madrid de Lorenzo Sanz pegó un pepinazo de época con el fichaje del francés, por el que pagó unos 6.000 millones de pesetas. Esto convertía al ex – jugador del Arsenal en el fichaje más caro de la historia del fútbol.

En Madrid no encontraría jamás su lugar. Llegó con mucha proyección, pero su excesiva juventud y su carácter distante provocaron no pocos roces entre él y sus compañeros, además de una suspensión del club por negarse a entrenar. A pesar de ayudar al club blanco a ganar su octava Copa de Europa con goles decisivos, el galo salió escopeteado de la capital para volver al PSG.

¿Es Nicolas Anelka uno de los jugadores más infravalorados de la historia?

¿Era Nicolas Anelka tan malo? Qué va. Su carrera dio muchas vueltas, tuvo altos y bajos, pero estamos hablando de un jugador con casi setenta internacionalidades con la selección francesa y una trayectoria de más de una década en la Premier League.

Cierto es que su juego fue mutando con el tiempo y sus cifras goleadoras bajando a la vez que escoraba su posición en el terreno de juego para jugar por cualquiera de las dos bandas, preferiblemente la derecha. Su altura, físico y correcto regate hicieron de él un jugador muy aprovechable para sus entrenadores.

Además de ser un auténtico reclamo para muchos managers que pusieron en él buena parte de las esperanzas de sus clubes (y de sus presupuestos). No en vano, es uno de los jugadores que más dinero ha movido en traspasos en la historia del fútbol.

4. Emmanuel Amunike

“La jugada preferida de Amunike, el saque de banda, mírala una y mil veces” (ver vídeo). Así rezaba el anuncio de la Renault Kangoo en el que el ex – futbolista era la estrella. Para el grueso de los aficionados, Emmanuel Amunike no es siquiera un jugador de fútbol digno, sino una especie de aberración que jamás debió de pisar un campo de fútbol.

¿Es esto cierto? Ni mucho menos. Tras salir del continente africano, Amunike recaló en el Sporting de Portugal, donde coincidiría con futbolistas de renombre como Sá Pinto, Naybet o un tal Luis Figo y, en realidad, nunca desentonaría. Sus actuaciones llamaron la atención de los ojeadores internacionales, pues no dejaba de ser un extremo con un buen manejo de ambas piernas y unas cifras goleadoras muy interesantes (62 partidos y 17 goles).

Amunike con la camiseta del Barcelona

El F.C. Barcelona se llevó a todo un campeón olímpico con Nigeria tras pagar 600 millones de pesetas. Sin embargo, la pesadilla de Amunike acababa de empezar, y es que sus constantes problemas de rodilla se iban a convertir en algo serio.

El africano pisó el Camp Nou con unas lesionas que finalmente le obligarían a retirarse, pues jamás recuperaría su nivel anterior.

3. Carlos Gamarra

Uno de los grandes defensas de Sudamérica durante la década de los 90 y uno de los jugadores más infravalorados de la historia. Se le recuerda en España por su nefasto paso por el Atlético de Madrid en la temporada 99-2000, la que llevaría al conjunto colchonero a Segunda División. El paraguayo fue un desastre, como todo el equipo.

Central de poca estatura (no pasaba del 1,80), destacaba por sacar el balón de forma precisa y estar siempre bien colocado. En Europa pasó por Benfica, AEK de Atenas e Inter de Milán, pero no llegó a consolidarse en ningún club, evidenciando que su lugar estaba en Sudamérica.

En el Atlético compartiría la zaga con su inseparable compatriota Celso Ayala, que tuvo idéntica suerte en su paso por España. Jugó tres Mundiales y en Francia 98 fue elegido en el once ideal del torneo. Además, ostenta un curioso récord de 724 minutos sin cometer una falta, algo insólito para un central.

Carlos Gamarra con la camiseta de Paraguay

“Carlos Gamarra sin dudas, era muy complicado pasarlo, no sé de dónde sacaba la fuerza y volvía, siempre fue muy duro, uno de los más duros que enfrenté en mi carrera”– Faustino Asprilla.

Robert Prosinecki

Otro jugador de anuncio. ¿Quién no recuerda al mítico «Prosickito»(ver vídeo)?  El nombre de Prosinecki en España estará manchado para siempre por un rendimiento irregular, comportamientos poco profesionales y, sobre todo, lesiones, muchas lesiones. ¿Eso le convierte en un mal jugador? Ni de broma.

Prosinecki era de esos genios incomprendidos para los que el fútbol no representa la totalidad de su vida. Solía estar por encima de su peso, fumaba, bebía y tenía un carácter que desesperaba a aficionados y directivos. Cuando le apetecía jugar, solía ser el mejor.

Diestro, corpulento y muy potente en sus primeros años de carrera, el croata llegó al Real Madrid tras ganar la Liga de Campeones con el Estrella Roja, cuando los equipos del este todavía aspiraban a lograr grandes cosas.

Robert Prosinecki con la camiseta de Croacia

Benito Floro lo descartó y tras tres temporadas puso rumbo a Asturias para jugar en el Oviedo. Después de una gran temporada, el F.C. Barcelona se anticipó al Atlético de Radomir Antic y lo contrató, tras quedar libre de su contrato con los madridistas. Pero Johan Cruyff nunca acabó de confiar en él.

Prosinecki formó parte además de la incipiente selección de Croacia que acabó tercera en el Mundial de Francia 98. Un equipo que compartía con otros mitos como Davor Suker, Zvonimir Boban o Goran Vlaovic. A día de hoy se le considera uno de los mejores jugadores croatas de todos los tiempos.

Gica Hagi, el jugador más infravalorado de la historia

El número uno de nuestra lista está considerado como el mejor jugador rumano de la historia.

No tuvo suerte primero en el Real Madrid, con el que dejó algunos destellos intermitentes de su gran calidad. Tras un par de temporadas, lo vendería al Brescia de la Serie B italiana, equipo con el que conseguiría ascender tras sólo un año a la máxima competición italiana.

Su poderoso golpeo de balón y su calidad en el regate hicieron que el F.C. Barcelona se fijara en él. Pero de nuevo su irregularidad y la exigencia de un club gigante hicieron que el rumano hiciera las maletas en busca de nuevos horizontes.

Y entonces se cruzó en su camino el Galatasaray, club en el que permanecería desde 1996 a 2001 y del que todavía se recuerdan sus hazañas. Hagi, junto con su compatriota Popescu o el mítico Hakan Sukur, consiguieron dar al Galatasaray la Copa UEFA del año 2000.

Con su selección logró jugar tres Mundiales, siempre con un rendimiento excelente.

¿Es Gica Hagi uno de los jugadores más infravalorados de la historia?

Quizás su carrera se quedó a medio camino, pero Hagi era un fenómeno. Una de las grandes zurdas que ha dado el fútbol mundial y quizás el más grande jugador de Europa del Este. ¿No me crees? Pincha el enlace.

2 comentarios en «Anelka, Amunike, Hagi… Top-10 jugadores infravalorados»

Deja un comentario