¿Es normal sentir pena cuando un jugador rival pierde? En el Game 3 Kawhi Leonard logró transmitir esa sensación incluso a los seguidores del rival más inmediato: no mereció perder. Al menos él no. Su esfuerzo titánico anotando canasta tras canasta y superando defensas muy duras no se vio recompensado. Y es que hay veces en las que ser Jordan no es suficiente. Así están siendo los impresionantes playoffs 2018-19 de Kawhi Leonard.
¿Está jugando Leonard al nivel de Michael Jordan?
Hablar de Michael Jordan es utilizar palabras mayores, y no se debe hacer a la ligera. No obstante, si hay alguien que transmite esa sensación de ser imparable, al mismo tiempo que anota canastas que cualquier mortal considera muy complicadas, es Kawhi Leonard. Alejado de toda duda sobre su estado físico, ahora es cuando empiezan a entenderse esos partidos que se perdió durante la temporada regular. El objetivo era estar aquí al 100%, y está dando incluso más.
Tras el tercer partido contra Philadelphia, Kawhi está lanzando prácticamente 20 tiros, con un porcentaje de acierto del 57’9%. El triple es otro recurso bien seleccionado: 46’8% de acierto con 5’8 intentos por encuentro. Por contextualizar un poco estos datos, Durant, probablemente el perfil más similar en cuanto a características, está en un 52-40, muy bueno, pero inferior.
Pero la magia de Kawhi no está en las estadísticas. Porque más allá de estar promediando 31 puntos y 7 rebotes, es la sensación que deja en los partidos. Llámese su defensor Butler, Simmons, Harris, Embiid, o una mezcla de los DPOY de los últimos 35 años (Kawhi incluido) que la conclusión es la misma: nadie lo puede parar.
Está elevando a otro nivel el uso de la media distancia y los tiros extremadamente punteados. Porque sus tiros de 2 no son precisamente bandejas y mates, y, sin embargo, su porcentaje se sostiene por encima del 62%. A esto hay que sumarle un añadido extra: apenas el 27% son asistidos, lo que implica que debe ser él quien supere a su par para acabar añadiendo puntos en el marcador.
Hero Ball en su máximo esplendor. Algo que, a la vez, está llevando a Toronto a su tumba.
Jordan tampoco pudo solo
Estos Playoffs están dejando ver un problema serio en la pizarra de Nick Nurse: no hay nada más allá de la Kawhidependencia junto a la explosión de Siakam y lo que pueda aportar algún jugador. Esto en el Game 1 funcionó de forma fantástica, propiciando una paliza a los 76ers. Sin embargo, Brett Brown ajustó los emparejamientos, “redujo” a Leonard, e hizo desaparecer al resto de la plantilla.
Fríos y dolorosos datos extraídos de Kia en Zona. Si Leonard se sienta, Toronto se desploma. No solo es que no haya nadie a su nivel, algo comprensible cuando hablamos del probablemente mejor two-way player de la NBA, es que no hay un solo jugador capaz de aportar lo suficiente como para suplir sus minutos de descanso.
Lowry está viviendo una segunda ronda muy negativa. Malas decisiones, tiros liberados fallados, penetraciones absurdas contra jugadores que le sacan 3 cabezas y 15 kilos… han vuelto los peores fantasmas a Toronto, aquellos que congelan el alma de sus jugadores. Y si bien no se puede congelar el alma de un Cyborg, se puede hacer con el resto de compañeros.
A jugadores como Siakam, Green, o Gasol no se les puede pedir mucho. Pascal necesita más regularidad, algo que el tiempo le concederá. Danny mejorar sus porcentajes, ya que hasta el momento ha fallado bastantes tiros liberados. Para Marc, la tarea que tiene sigue siendo igual de complicada: minimizar a Embiid lo máximo posible no es nada sencillo.
En último lugar, Toronto ha pasado de tener el mejor banquillo de la NBA a prácticamente no tener a nadie que aporte. Entre otras cosas, esto se debe a los movimientos antes del trade-deadline que llevaron a Gasol al equipo, además de la baja de Anunoby. Pero no solo eso: falta confianza del entrenador.
¿Qué espera en esta serie Raptors vs Sixers?
Diversión, mucha diversión. Leonard está en unas dinámicas Jordanescas casi imposibles de alterar. Cuando entra en esa fase de trance, para la que apenas necesita un par de tiros, se transforma en el ciborg silencioso que destroza defensas rivales. Porque sí, no es Jordan, pero es seguramente el jugador más cercano que hay en cuanto a dominio a ambos lados y sensaciones. La pregunta es: ¿acompañará alguien al pobre robot?
Toronto debe despertar. Ya no hay más excusas. Salir con un 3-1 de Philadelphia dejaría la serie muy decantada hacia los de Philly. Es la hora de Lowry, Green, Gasol, pero también de los Ibaka, VanVleet, Powell… todos deben dar un paso al frente, y por lo que parece según las declaraciones, quieren darlo. No deben olvidar que un anillo no se gana solo, aunque LeBron James quiera convencer a su público de lo contrario.
Lowry on Kawhi: "We've gotta help him, myself especially. I've gotta help him, score more, gotta help him on the floor. We've all gotta help him. He's playing unbelievable right now, but we're not giving him any help. Me, I'm not giving him any help. Gotta help him."
— Josh Lewenberg (@JLew1050) May 3, 2019
Sigue quedando además una batalla (o debería) entre los entrenadores. Brown ha resultado vencedor en estos dos últimos partidos, sabiendo lo que su equipo necesitaba mientras que Nurse no reaccionó. Parece poca cosa, pero es probable que el entrenador de los Raptors acabe despedido si esto no cambia y son eliminados en semifinales. A priori el proyecto estaba mucho más maduro que los 76ers, y no se está viendo tanta diferencia.
¿Qué pasa con el futuro de Kawhi Leonard?
Lo que todo el mundo se pregunta. Si el equipo de Toronto vuelve a caer de forma precipitada en semifinales… ¿Qué hará Kawhi Leonard? La verdad es que el futuro para la franquicia no es demasiado esperanzador si se llega a este escenario. “La Garra” tiene muchos equipos interesados en sus servicios, capaces además de darle un contrato máximo. Los Ángeles Clippers suena con fuerza desde hace un tiempo, pero no son los únicos, y el jugador tendrá que meditar hacia donde dirige su carrera.
Independientemente de su salida en San Antonio, de la que aún se desconocen muchos detalles, lo cierto es que ha vuelto a demostrar de lo que es capaz cuando está sano. Hasta esta serie contra Philadelphia, era el líder en el equipo con el segundo mejor récord de la conferencia, candidato al MVP, y una sensación de ser la superestrella de un equipo que llegaría hasta las finales con menos problemas de los que viven.
Cada partido épico con 13/20TC no ayuda a una posible renovación en Canadá. Pese a la victoria en el primero, la sensación fue de excesiva dependencia, y un equipo no funciona como tal si depende tantísimo de su mejor jugador. Esto no resta valor a sus actuaciones en la serie, pero que todo comience y termine con él es un problema más grave de lo que parece, y que habla más mal que bien de Toronto.
Aguarda a cualquier fan un final de semifinales tremendo. Que se eche a un lado Juego de Tronos, porque esto son los Playoffs, y lo que suceda en esta serie sacudirá el verano.