La destreza de Curry, los triples letales de Klay, la efectividad de Durant, la aguerrida defensa de Green. O el notable aporte de los suplentes de los Warriors. Fueron muchos los enemigos contra los que tuvo que pelear LeBron James en las finales de la NBA. Sin embargo, el principal obstáculo que tuvo que sortear el Rey fue el nivel mediocre de sus propios compañeros. Una situación que le generó más de un dolor de cabeza y también le provocó una fuerte lesión. LeBron jugó con una mano rota.
LeBron mano rota: título alternativo para las finales del 2018
Anoche, tras la victoria definitiva de Golden State, varias fuentes periodísticas hicieron circular un rumor que indicaba que LeBron James se había lesionado su mano derecha luego de darle un puñetazo a una pizarra después de que su equipo perdiera en la prórroga el primer partido por 124-114, encuentro que pudo haber ganado de no ser por el fallo desde la línea de libres de George Hill, la ridícula marcha atrás de JR Smith al capturar el rebote final o la falta de reacción de su entrenador Tyronn Lue para pedir un tiempo muerto.
«Me autolesioné. Después de ese primer partido sentí que habíamos perdido una gran oportunidad. La manera en la que habíamos jugado, los fallos arbitrales… tuve la sensación de que nos habían quitado el partido. Los otros tres juegos los disputé prácticamente con la mano rota», confirmó el astro en conferencia de prensa.
De acuerdo a la cadena de televisión ESPN, el diagnóstico fue una fuerte contusión. James tuvo que someterse a dos resonancias magnéticas, debió usar protección ortopédica cuando no estaba practicando, jugando o en presencia de los periodistas. Además de evitar utilizar el golpe como excusa, la estrategia estaba orientada principalmente a no darle ninguna pista a los Warriors sobre su condición física. Pese a todas estas adversidades, LeBron salió a la cancha en cada uno de los cuatro partidos de las Finales y promedió 34 puntos, 10 asistencias y 8.5 rebotes, mientras que anotó el 52% de los tiros de campo.
El futuro de LeBron James, incierto
LeBron, de 33 años, se convertirá en agente libre a partir del próximo 1 de julio. Son varios los equipos que tienen lista la chequera para contratarlo. Entre ellos: Houston Rockets, Philadelphia Sixers, Los Angeles Lakers y los New York Knicks.
