La situación actual provocada por la pandemia mundial ha desembocado en una medida especial, como será la burbuja que se realizará en Orlando a partir del mes de julio. Este nuevo formato aumenta la posibilidad de que surja un campeón sorpresa de la NBA.
Un triunfador con el que nadie contaba al principio de la temporada cuando se hacían los pronósticos. Algo que no ocurre muchas veces, pero hoy os traemos cinco casos espectaculares.
Campeones de la NBA por sorpresa
A continuación se presentan algunos casos similares que se han producido a lo largo de la historia. Equipos con las que nadie contaba a principio de temporada y se acabaron alzando con el anillo contra pronóstico.
Houston Rockets (6º clasificado) 1995: el segundo anillo de las torres gemelas
El equipo de Texas llegaba a los playoffs tras quedar sexto en la temporada regular con un récord (47-35), pese a ser en esos instantes los vigentes campeones. A lo largo de las diferentes rondas el equipo logró eliminar a los grandes favoritos de sus conferencias.
Su primera piedra en el camino fueron los Utah Jazz (3º) de Karl Malone y John Stockton, que comenzaban a surgir como una potencia de la NBA. La eliminatoria tuvo una gran igualdad decidiéndose únicamente por un partido de diferencia (3-2).
En las semifinales de conferencia los rivales fueron los Phoenix Suns de Charles Barkley, que finalizó la temporada como segundo en la clasificación, siendo un claro aspirante al título. De nuevo la igualdad fue máxima, decidiéndose en esta ocasión en un séptimo partido (4-3) que el equipo de Hakeem Olajuwon tuvo que ganar fuera de casa.
Tras dos victorias inesperadas, los Houston Rockets llegaban a la final de conferencia ante el máximo aspirante, los San Antonio Spurs. El pívot David Robinson comandaba al equipo hasta la final siendo el MVP de esa temporada, por lo que se esperaba una gran batalla entre los jugadores interiores de ambos conjuntos.
Hakeem Olajuwon vs Shaquille O’Neal
Sin embargo, la balanza de la eliminatoria se decantó sin gran dificultad del que por aquel entonces era el campeón tras seis encuentros (4-2). De esta forma, los Houston Rockets daban la sorpresa y volvían a las finales un año después de lograr su primer campeonato. El rival serían los Orlando Magic del máximo anotador de la liga, Shaquille O’Neal, que contaba con un gran escudero de nivel como era Penny Hardaway.
Pese a la “supuesta” diferencia de nivel entre ambas franquicias los Houston Rockets revalidaron el título tras barrer a su rival (4-0). El papel de Hakeem Olajuwon frenando al pívot de los Orlando Magic fue fundamental para lograr el triunfo.
Detroit Pistons (3º clasificado) 2004: el regreso de los Bad Boys
El equipo de la ciudad del motor llegaba como tercer clasificado a los playoffs de 2004 con un gran conjunto fundamentado en su gran defensa. Sus primeros rivales fueron los Milwaukee Bucks, quienes cayeron de forma contundente (4-1). Tras una primera eliminatoria relativamente sencilla, comenzaban las complicaciones para los Pistons.
Los New Jersey Nets, clasificados en segunda posición y finalistas la temporada pasada, eran los rivales en las semifinales de conferencia. Este gran equipo está compuesto por jugadores de máximo nivel como Jason Kidd, Richard Jefferson, Kenyon Martín o Alonzo Mourning. El choque entre ambos equipos estaba muy igualado, decidiéndose en un séptimo fatídico que consiguieron ganar los nuevos Bad Boys.
Sin embargo, pese a lograr este gran avance, el mejor equipo de la temporada esperaba en las finales de conferencia. Los Indiana Pacers con 61 victorias eran los grandes favoritos para llegar a las tan ansiadas finales.
El equipo estaba compuesto por Jermaine O’Neal, Ron Artest y un veterano Reggie Miller, siendo además un equipo con una gran defensa como su rival, por lo que se esperaba un choque muy duro entre ambos. Pese a la igualdad la eliminatoria se inclinó del lado de los de Detroit, que necesitaron seis choques para clasificarse a la gran final.
Ni O’Neal, Bryant, Payton y Malone los detuvieron
El último obstáculo eran Los Ángeles Lakers, una franquicia que buscaba recuperar el dominio que tuvo en los primeros años del nuevo siglo. Para volver a estar en la cima, el equipo de Hollywood logró incorporar a unos veteranos Karl Malone y Gary Payton, que se sumaban a la gran dupla formada por Shaquille O’Neal y Kobe Bryant. Ante esta situación se esperaba un choque de David contra Goliat y, por lo tanto, otorgando un papel de favorito indiscutible a los Lakers.
Pero los pronósticos no pudieron equivocarse más, ya que la unión fue la clave para que los Pistons fueran los campeones. La división de los Lakers fue otro factor importante para decantar la balanza del lado del Este en estas finales. Los nuevos Bad Boys hicieron honor a su apodo y arrasaron a su rival como hicieran sus antecesores a finales de los 80.
En este caso los Pistons permitieron que los angelinos lograran una victoria, pero dejaron una imagen que destruyó por completo al equipo y demostró que Detroit volvía a estar entre los mejores.
Dallas Mavericks (3º clasificado) 2011: el hombre que destruyó al Big Three
Probablemente uno de los campeones mas sorprendente fueron los Dallas Mavericks de 2011. El equipo tejano llegaba a los playoffs como tercer clasificado (57-25) y se enfrentaban en primera ronda contra los Portland Trail Blazers. El enfrentamiento se saldó con un 4-2 a favor de Dallas. Los siguientes rivales serían probablemente unos de los más complicados de la temporada, Los Ángeles Lakers.
El equipo de Hollywood era el actual campeón de la competición, por lo que la eliminatoria sería de una gran igualdad y dureza. Sin embargo, la eliminatoria fue totalmente lo contrario, ya que los Mavericks eliminaron de forma contundente a su rival (4-0).
El equipo de Mark Cuban estaba a solo un paso de volver a las finales de la NBA tras cinco años. Su último escollo para llegar a la batalla final eran unos jóvenes e inexpertos Oklahoma City Thunder. Esta falta de partidos a sus espaldas fueron los culpables de no poder plantar cara y ser eliminados (4-1).
Nowitzki vs LeBron, Wade y Bosh
Las finales volvían al American Airlines Center y casualmente su rival volvía a ser el mismo que en la última ocasión. Los Miami Heat esta vez era el claro favorito, ya que en la agencia libre había logrado formar un gran Big Three (LeBron James, Chris Bosh y Dwyane Wade). El excelso nivel de la plantilla del Este dejaba la balanza inclinada hacía su lado a la hora de dar un favorito.
Pero de nuevo, como ya ocurriera con los Lakers, los Dallas Mavericks dieron la sorpresa. Jugadores como Jason Terry, Jason Kidd o Jose Juan Barea fueron indispensables para poder lograr el título. Aunque el principal “culpable” del título fue Dirk Nowitzki, quien dominó las finales siendo un quebradero de cabeza para la defensa rival.
Los Miami Heat acusaron la falta de conexión entre los nuevos componentes y también la mala actuación de LeBron James en el cuarto partido (3 de 11 en tiros de campo). De esta forma, los Dallas Mavericks lograban el ansiado anillo impidiendo que el rey lograra su primer título, rompiendo todas las quinielas.
Cleveland Cavaliers (1º clasificado) 2016: un anillo para la historia
El equipo de LeBron James volvía a unas finales tras perder por 4-2 ante los Golden State Warriors, debido en gran parte por la lesión de sus dos escuderos. Sin embargo, un año después llegaban de nuevo a la gran final ante el mismo equipo. Se esperaba un gran choque de máximo nivel con una mayor igualdad tras recuperar a Kyrie Irving y Kevin Love.
Pero el guion cambió drásticamente cuando el equipo con mejor récord de la historia se colocaba el 3-1 en la eliminatoria. En este punto la historia era clara y directa, nadie había logrado remontar este resultado en unas finales y en ese preciso instante comenzó a forjarse la leyenda.
La mayor remontada de la historia de las Finales
La franquicia de Ohio reducía las diferencias hasta forzar un séptimo partido en el Oracle Arena que quedó marcado por dos acciones que ya han pasado a la historia. El primero fue un tapón de LeBron James a Andre Iguodala para evitar que los locales se pusieran por delante. La siguiente jugada fue el punto final del capítulo cuando Kyrie Irving anotaba un triple para ganar el campeonato.
Toronto Raptors (2º clasificado) 2019: el triunfo de todo un país
La única franquicia que se encuentra más allá de las fronteras de Estados Unidos se enfrentaba a unos playoffs en los que se jugaban todo. El equipo había arriesgado consiguiendo que Kawhi Leonard jugara al menos una temporada en Canadá para ser un claro aspirante al título. En la primera ronda los rivales fueron los Orlando Magic, quienes no fueron un gran obstáculo para pasar de ronda (4-1).
El siguiente choque fue contra los Philadelphia 76 Sixers, los cuales poseían un gran nivel y quinteto fundamentado sobre todo en su potencia interior y su pilar básico: la defensa. La eliminatoria tuvo tal igualdad que se llegó al séptimo partido, decidiéndose este con una canasta ganadora de Kawhi Leonard que ya ha pasado a la historia.
Kawhi pudo con el MVP y unos Warriors mermados
Tras esto, los Toronto Raptors se enfrentaron a Giannis Antetokoumpo (que sería el MVP posteriormente) y sus Bucks. Pese a perder los dos primeros choques, el equipo canadiense lograría darle la vuelta a la eliminatoria y entrar en su primera final.
En esta última fase aguardaban los actuales campeones, los Golden State Warriors, que buscaban su tercer título consecutivo. El título sería para los canadienses gracias a la unidad que mostró, pero sobre todo por las lesiones de su rival (Kevin Durant, Klay Thompson).
