En su pueblo le llaman león y eso es lo que es Sadio Mané. Un auténtico jugadorazo que no sólo se caracteriza por sus habilidades en cuanto a fútbol se refiere, sino también por su increíble humildad. Es un jugador al que parece no gustarle la fama pero sabe aprovecharla para ayudar a su pueblo y familiares.
Desde su llegada al Liverpool, se ha convertido en uno de los mejores jugadores de la Premier y del mundo. Es, para muchos, tanto aficionados como de Liverpool o del fútbol en general, la pieza fundamental del proyecto de Jürgen Klopp. El senegalés llegó en el mercado de verano de 2016, siendo uno de los primeros fichajes de la era de Klopp. Había muchas dudas sobre el precio que pagó el club al Southampton, una cifra cercana a los 35 millones de libras.
El senegalés llegaba siendo la revelación de los Saints la campaña pasada anotando varios goles y, entre ellos, el hat-trick más rápido de la historia de la Premier League. A pesar de todas las dudas, Jürgen Klöpp confío en él y así mismo los hinchas de los ‘Reds’ y no tardó mucho en demostrar su talento y que valía el precio que habían pagado por él.
Mané anotaría en su primer partido de la liga marcando un golazo de zurda al Arsenal en el Emirates Stadium. Fue el pilar del equipo aquella temporada (16/17) al llevarlos a la siguiente Champions League. Pasó del extremo derecho, jugando en una delantera con Firmino y Coutinho, a jugar de extremo izquierdo como lo hacía en Southampton, para empezar a establecerse como uno de los mejores jugando con Salah y Firmino en el trío ofensivo.
¿Cómo juega Mané?
Está claro que Mané no necesita de jugadores de alto calibre para triunfar en un equipo. Lo demostró en sus ex-equipos y ahora en el Liverpool. Sadio pasó de jugar de la banda derecha en los Reds, a jugar como extremo izquierdo desde la llegada de Salah. El egipcio llegaría para tomar esa banda derecha y hacerla suya, así como Mané hizo de su propiedad el carril izquierdo.
Es un guerrero que no se cansa en ningún momento del partido, siempre te quiere ganar un encuentro y buscar los tres puntos, así estés 0-3 debajo en el marcador, en el minuto 90. Aún así Mané va a ir a buscarte ese resultado. Está ya totalmente establecido en su puesto, Sadio es un jugador que le encanta el regate y el desborde. En cada partido de Liverpool vemos la jugada esencial del senegalés, la cual es: correr por su banda, confrontar al defensor, regatear, desbordar y buscar el centro a pierna cambiada o en algunas oportunidades recortar hacia el centro y pegarle al poste más lejano.
Tiene mucha movilidad adelante, se le ve cambiándose de banda o filtrándose hacia el medio cuando se le da la oportunidad. Esto también lo ha convertido letal definiendo con la cabeza, ya que Klopp le da la libertad de ir hacia el medio y, por lo tanto, ha hecho que Mané siempre esté atento para mandar la pelota al fondo con la cabeza desde un centro. Comanda la mayoría de contragolpes del equipo, gracias a que es según muchos de sus compañeros el más veloz del club. Además, la velocidad que tiene la aprovecha para ayudar defensivamente al equipo. Es el delantero del Liverpool que más se le ve presionando en el retroceso a los jugadores rivales, simplemente un motor, un león.
Evolucion de Mané a través de los años
En el campo, Mané ha evolucionado en grandes cantidades, y esto se nota en cómo ha corregido sus errores. Los ha mejorado y los ha vuelto; los que eran su peor defecto a su mejor habilidad. Un claro ejemplo es la notable mejoría en su definición frente al arco, pasó de ser un jugador que anotaba 10 goles por temporada, a ser una estrella que marca más de 20 en toda la campaña.
Ha mejorado mucho su toma de decisiones, que para decir verdad no era la mejor. Se le criticaba por escoger el pase más difícil o por pecar de individualista, y eso ha cambiado a través de los años. Se ha transformado en un jugador que no sólo marca ni presiona sino que también se asocia con sus compañeros y asiste.
Mané nunca se lesiona
Algo curioso del extremo del Liverpool es que en muy, pero muy pocas ocasiones, ha presentado alguna lesión y mucho menos lesiones a largo plazo. Mané siempre está luchando la pelota y recibiendo montón de golpes. En casi todos los encuentros se le ve en el suelo porque parece la única forma de detenerlo, se levanta y sigue jugando tranquilo. Parece que esté hecho de hierro. Además, mantiene mucho la calma en cancha. En escasas oportunidades ha perdido la paciencia y se ha puesto a pelear o discutir.
Estadísticas de Mané
- (Soton-Salzburg) 14/15: 34 PJ, 12 Goles, 3 Asistencias.
- (Soton) 15/16: 39 PJ, 14 Goles, 6 Asistencias.
- (Liverpool)
- 16/17: 29 PJ, 13 Goles, 5 Asistencias.
- 17/18: 44 PJ, 20 Goles, 10 Asistencias.
- 18/19: 49 PJ, 26 Goles, 2 Asistencias.
- 19/20 (en curso): 17 PJ, 10 Goles, 3 Asistencias.
Sadio como persona
Si como futbolista es uno de los mejores del mundo en su posición y en general, como persona es humilde y amable. Sabemos que el senegalés nació en un pueblo muy pobre, donde no tenía ni zapatos para jugar fútbol. A muy corta edad, tomó el reto de salir de su pueblo a la ciudad para presentar pruebas a ver si quedaba en el equipo. A aquellos entrenamientos se presentó con zapatos rotos y shorts que no eran de fútbol. Se comenta que el entrenador de aquel equipo pensó que no tenia talento, juzgó mal y Sadio lo sorprendió.
Hemos visto que en vacaciones siempre va a ver a sus familiares, estar en su casa y en su pueblo, ayudando a los vecinos y compartiendo en su país. En cada Ramadán dona dinero, ha hecho hospitales y escuelas muy cerca de donde quedaba su casa. Y si no logramos creer estas cosas, él mismo ha demostrado en algunos vídeos que es una personalidad totalmente humilde. Como en aquel donde ayuda al hombre con los botellones de agua de la selección de Senegal o cuando le regala su camiseta a un recoge-pelotas en un encuentro.
En fin, no solo es uno de los mejores jugadores del mundo, no le basta con eso. Se ha ganado el cariño de todo el que siga al fútbol a punta de eventos de caridad y de golazos.