Allegri, el entrenador de élite silencioso

Massimiliano Allegri, el playboy de los entrenadores, alguien peculiar con gesto tímido que poco a poco se ha labrado una reputación en el mundo del fútbol.

Perfil de Allegri

Allegri es el clásico técnico que antes era futbolista, sin embargo nunca llegó a la élite como tal, centrocampista de equipos humildes sobre todo en divisiones inferiores a la Serie A aunque logró jugar en dicha división resaltando en una temporada para el recuerdo con el Pescara, 12 goles en dicha temporada, nada mal para el bueno de Allegri. Como entrenador, se fue ganando el respeto poco a poco, empezó desde abajo en la Serie C 2 hasta cuatro años después que pudo entrenar en la Serie A al Cagliari donde tendría como jefe al díscolo de Massimo Cellino. Con los «rossoblu» tuvo buenas temporadas pese a malos inicios, estructurado con jugadores como Astori, Lazzari o Matri entre otros Allegri implantó un juego que llevó al Cagliari a hacer varias grandes temporada, sin embargo con Cellino al mando su cabeza siempre corrió peligro hasta que fue injustamente despedido en 2010.

Pese al despido Allegri ya se había ganado elogios en el fútbol italiano, grandes clubes fijaron su mira en él siendo el AC Milan su destino, allí ganó una Serie A en su primera temporada, el último título del Milan hasta la fecha, pasó unos años más, premio «Panchina d’Oro» incluido, hasta que otra vez fue injustamente despedido tras serle desmantelado un equipo campeón por las urgencias económicas. Por suerte para Allegri tras ser despedido aquel enero de 2014, unos meses después la Juventus llamó a su puerta, Conte dejó el listón alto y renunció a los bianconeros a cambio de la azzurra, Allegri tenía la oportunidad de dirigir al club que dominaba el calcio en las últimas temporadas, con una cuenta pendiente, rendir en Europa. Allegri llevó a la Juve a una temporada histórica en la 2014-2015, Serie A, Copa de Italia y una final de Champions contra el todo poderoso Barcelona, previamente eliminando históricamente al Real Madrid. Y repitió el éxito en la temporada 2016-17, Scudetto (6º consecutivo de la Juve), Coppa y final de Champions, en la que caería ante el Real Madrid.

Allegri manteado por los jugadores del Milan tras ganar el Scudetto.
Allegri manteado por los jugadores del Milan tras ganar el Scudetto. championsleague.ca

Pero ¿cómo es el Allegri entrenador? Pues es un entrenador que se amolda a lo que tiene, no impone su idea si ve que no tiene jugadores para ello, va amoldándose y cambiando poco a poco lo que tiene. Su filosofía la explica muy bien en pocas palabras «antes incluso de empezar a pensar acerca de la estrategia y la forma de configurar el equipo, es absolutamente crucial que se enseñe a los jugadores a que interpreten el partido y reaccionen por ellos mismos según como fluya el mismo«. Aunque su estrategia habitual sea el 4-3-1-2 en la Juve por ejemplo no hizo un cambio radical del 3-5-2 de Conte, se amoldó a lo que había dejado el actual técnico de la azzurra y lo fue modificando poco a poco sacando otra virtud de su filosofía: la de lograr que un mismo jugador sea capaz de jugar diferentes papeles dentro del campo. En esta última temporada, aplicó el estilo 4-2-3-1, con el que la Juve se convirtió en un equipo temible, sobre todo en defensa. Su gran estandarte es tener un clásico centrocampista que sea el director de juego, con carisma y con calidad suficiente para dirigir cualquier tipo de juego, dependiendo del rival, ya sea al toque y pausado o al contragolpe. Tildado de entrenador defensivo sus equipos siempre han sido de los mas goleadores, un cliché injusto a un estilo donde la intensidad defensiva es una virtud al servicio de una mejoría colectiva que acaba arrollando al rival y por consecuencia ayudando a la ofensiva a ser letal.

Allegri posando con el Scudetto conseguido con la Juve.
Allegri posando con el Scudetto conseguido con la Juve. ansa.it

Aunque el perfil de Allegri le otorgue ese aspecto de «jefe de la mafia», se aleja mucho de ese entrenador firme y duro con sus jugadores. En su época del Milan tuvo desavenencias con jugadores como Pirlo o Gatusso, sin embargo siempre demuestra tener talante y suele tender la mano en los conflictos, lo hizo con Pirlo a su llegada a la Juventus. Entrenador tranquilo, pacifista aunque con cierto carácter se está ganando una reputación más allá del fútbol italiano, algo que le está sirviendo para ser colocado en clubes importantes, aunque acaba de renovar hasta 2020 con la Juve. Como él mismo dice «no hay que dejarse llevar demasiado en los grandes momentos ni tampoco venirse abajo en los malos«.

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