Hoy, 12 de junio de 2020, daría comienzo la EURO 2020. Quién nos iba a decir hace un año que estaríamos retomando LaLiga tanto en primera como en segunda, que los ascensos a segunda división llegarían a plantearse solucionarlos por métodos más similares al “piedra, papel, tijera” que a los propios del fútbol, y que hasta cierto punto la resolución de la tercera, por momentos, tuvo tantas “idas y venidas” que el haberlo resuelto jugando al parchís sería simplemente una idea descabellada más, entre las propuestas.
Los estadios de la EURO 2020 ‘fantasma’
Hoy, en el estadio olímpico de Roma habría de inaugurarse el campeonato con los azzurri jugando como visitantes frente a la selección turca. Mañana tocaría un Gales-Suiza en Bakú, capital de Azerbaiyán, un Dinamarca-Finlandia en Copenhague y finalmente un Bélgica-Rusia, también con la selección local jugando de visitante en el ya mundialista estadio Krestovski del Zenit de San Petersburgo.
Pero un momento, ¿por qué están jugando en diferentes ciudades? ¿Estos campeonatos no se juegan en un solo país (o coorganizado por dos)? Pues correcto, pero esta Eurocopa quisieron que fuese excepcional por ser conmemorativa del 60 aniversario de la UEFA, por lo que después del proceso conveniente, la organización tomó esta decisión.
¿Cuáles son los estadios de la EURO 2020?
Así pues, tenemos una lista de 12 estadios europeos que acogerán el campeonato, siendo nuestro representante el nuevo estadio de San Mamés. La final y algún que otro partido más serán en Wembley, y también serán partícipes otros estadios míticos europeos como el escocés Hampden Park de “la novena” del Real Madrid, o el renombrado Amsterdam Arena como Johan Cruyff Arena.
A los 8 ya mencionados, se le añade otro buque insignia tanto por infraestructura como por reputación deportiva de su propietario, el Allianz Arena del Bayern de Múnich. Este estadio marcó una tendencia o punto de inflexión en los diseños de los estadios que vinieron a posteriori, y que en sus inicios compartían con su vecino, el TSV 1860 Múnich, hasta trasladarse al Grünwalder Stadion.
Tanto el Staid Aviva de Irlanda, como el Estadio Nacional de Bucarest forman también parte de los 12 afortunados de este campeonato, y tienen en común que en ambos se jugaron finales de Europa League y de forma consecutiva, que en ambas fueron finales entre equipos del mismo país, y que también en las dos sus representantes eran de la península ibérica. En el 11, Porto y Braga se disputaron el título en el Aviva Stadium, mientras que en el 12 los aficionados españoles recordamos la final entre Atlético y Athletic.
El último de los 12, es el Puskás Arena de Budapest. Estadio que suple al antiguo Ferenc Puskás Stadion, donde jugaba como local la mejor selección de Hungría de la historia y su estrella nacional Puskás, y en el cual Inglaterra se llevó la mayor goleada de su historia.
La candidatura de España para la EURO 2028 y el mundial 2030
Y ahora bien, visto el nivel de estos estadios como los de la EURO de Francia, el mundial de Brasil y de Rusia, con el interés sabido de España en organizar el mundial 2030 (conjuntamente con Portugal) o la EURO 2028, ¿estarían nuestros estadios al nivel establecido? ¿Merecen la pena los desembolsos públicos para el retorno futuro?
Los posibles estadios de la EURO 2028 y el mundial 2030
Si miramos al mundial de España 82 y sus sedes, casi todas las infraestructuras acabaron teniendo un retorno posterior, ya que muchas de las ciudades que fueron sede en ese campeonato, contaban con estadios vetustos e inadaptados a sus tiempos o que se habían quedado pequeños para las masas sociales que los seguían.
Riazor, Balaídos, El Tartiere, El Molinón, San Mamés, Nuevo Zorrilla, Vicente Calderón, Santiago Bernabéu, La Romareda, Camp Nou, Sarriá, Mestalla, Rico Pérez, Martínez Valero, Benito Villamarín, Pizjuán y La Rosaleda. Todos ellos han rendido satisfactoriamente. Todos, a excepción de hasta cierto punto el Martínez Valero.
El Martínez Valero es una instalación que la mayor parte de su existencia ha vivido con el anillo superior de su graderío cerrado. Es habitual verlo con público únicamente en su anillo inferior, a excepción de su último breve y convulso paso por 1ª división y los partidos de ‘La Roja’.
Siendo discutible cualquier aspecto estético, o del porqué de las sedes, podemos decir que sin saber a ciencia cierta el balance económico del mundial del 82, en cuanto a las infraestructuras, estas fueron y son exprimidas aún a día de hoy a diferencia de muchos de los estadios de la EURO de Portugal, el mundial de Brasil, o mismamente en Sudáfrica. Fue aquí donde el Soccer City Stadium que nos vio levantar la copa del mundo, y que es uno de los más grandes del mundo con capacidad para casi 95 mil personas, queda sobredimensionado hoy en día con un promedio de poco más de 10 mil espectadores por partido.
Ni el viejo Tartiere, ni el viejo San Mamés, ni el Calderón ni Sarriá existen ya, pero mientras existieron fueron rentabilizados. Los demás, con mayores o menores reformas, perduran en el tiempo viendo fútbol profesional.
A día de hoy la candidatura mundialista española quiere presentarse conjuntamente con Portugal, para hacerla más fuerte y darle más posibilidades como ocurrió en 2018, en donde se decidieron las sedes del mundial de Rusia y de Catar bajo sospechas de corrupción, y que al parecer fueron supuestamente demostradas. Mientras tanto, para la EURO la candidatura sería en solitario.
¿Están los estadios de la EURO 2028 preparados en España y Portugal?
¿Podríamos pues albergar ese mundial? Pues obviando las controversias de las candidaturas compartidas, o que las infraestructuras entre España y Portugal no son las que debieran o se le suponen a estos países en el año 2021, analicemos los estadios.
El número de sedes varía a partir del mundial de Norteamérica 2026, porque hay más participantes. De 32 pasan a 48. No se sabe exactamente el número mínimo de estadios para este evento con 48 participantes, en donde Norteamérica presentó 24, pero que parece ser que reducirán a 20. Por lo que pongamos que ni las 12 sedes de Rusia ni las 20 de un continente, pongámonos en 16 conjuntamente con Portugal.
Los estadios portugueses que mínimamente pueden aportar a un grandísimo nivel son: Estadio Da Luz, Estadio Alvalade y Estadio do Dragão. En cuanto a España, teniendo en cuenta las reformas de estadios ya en marcha: San Mamés, Metropolitano, Santiago Bernabéu, RCDE Stadium, Camp Nou… pero ¿y el resto?
Anoeta quedaría a 500 plazas para dar cabida al mínimo, por lo que no sería ningún problema ni coste elevado. En Zorrilla se podría construir una provisional en el fondo sin cerrar, o realizarlo parcialmente y darle una reforma importante. La Cartuja no valdría por las pistas de atletismo, y además hay dos estadios propiamente de fútbol en la ciudad. Si el Real Betis acometiese la reforma de lo restante, sería otra buena sede, mientras que el Pizjuán debiera recibir una gran reforma. La discrepancia con La Cartuja aparece en el hecho de que habría que invertir dinero en una instalación que ya es un elefante blanco, y seguiría siéndolo debido a la no intención de ser ocupado por ninguno de los clubes de la ciudad.
Mestalla y su historia ya la conocemos, pero podría ser el empujón definitivo para que se acabe. De igual manera la Romareda, que está vetusta y pendiente de remodelar, entraría de nuevo en la lista mundialista.
El Sadar no serviría por el aforo al igual que Mendizorroza en cuanto sean reformados. Ni El Tartiere, ni El Molinón, ni La Rosaleda llegan al aforo mínimo, quedándose en diez mil por debajo, y siendo aun así excesivo reformarlos para luego quedar sobredimensionados, pero dejando la posibilidad. Riazor y Balaídos estarían en las mismas. Tienen grandes handicaps porque estarían excesivamente sobredimensionados, aparte de ser de titularidad municipal, el segundo de ellos necesita una reforma que le impide ser candidato. Gran Canaria se queda 8000 por debajo y no tiene cubierta. Y en cuanto al Rico Pérez y al Martínez Valero, hoy en día creo que queda excesivo.
El total de estadios sería de 15, sin contar la Cartuja. Todo esto sin tener en cuenta otros numerosísimos criterios que establece la FIFA para elegir las sedes, como su impacto ambiental, accesos, infraestructuras, etc.
¿Creéis que podríamos organizarlo? ¿Estaríais dispuestos a gastar dinero en ello, o lo veis como una inversión? ¿Qué sedes añadirías?
Lo que podemos sacar en conclusión es que estaríamos más cerca de organizar una Eurocopa que un mundial, pero nunca se sabe. Mientras tanto, nos quedamos viendo el final de liga más extraño de su historia, y esperando a ver qué sucede con la EURO 2020/1.
