La Liga MX es un destino exótico y que paga muy bien a jugadores de fútbol en América. Grandes estrellas de Europa se dejaron seducir por los altos salarios, otras por la pasión y algunas más simplemente por vivir una aventura. Pero, ¿cuáles son los mejores jugadores que pasaron por México?
Mejores jugadores de la historia de la liga mexicana
El fútbol mexicano puede presumir de haber tenido en sus filas al líder generacional del Madrid de la ‘Quinta del Buitre’, a una figura argentina del Valencia o a la ‘Pantera negra’ de Portugal, entre otros.
Eusebio (Monterrey)
Con 33 años de edad, el emblema del Benfica recaló en 1975 en México para vestir la casaca de los Rayados de Monterrey. Aunque, al contrario de las personalidades que conforman este listado, Eusebio tuvo un mal paso en tierras aztecas, ya que en 10 encuentros solo anotó un gol.
La “Pantera negra” sufrió varias lesiones en la rodilla, razón que lo maltrató en su estadía en el fútbol mexicano. A pesar de eso, Monterrey llegó hasta las semifinales del torneo y Eusebio se marchó al Toronto Blizzard de la North American Soccer League (NASL).
«Me gustó mucho el tiempo que pasé en Monterrey, su gente y sus jugadores. ¿Por qué jugar allá? Monterrey pagó bien y uno es profesional. Si un club paga bien no podemos echarnos para atrás», declaró para el diario Excélsior.
Emilio Butragueño (Atlético Celaya)
La llegada en 1995 del jugador del Real Madrid a México acaparó los titulares de la semana. Además, se trató de la figura generacional de la ‘Quinta del buitre’, Emilio Butragueño. Algo impensable cuando se especuló en los medios de comunicación con el arribo del seis veces campeón de La Liga con los ‘Blancos’.
En su primer año en México, Butragueño marcó 17 goles y asistió en 8 ocasiones. Números relevantes para un equipo y una ciudad que tiene una gran tradición futbolística. Para la sorpresa de todos, aquel Celaya llegó a la final de la temporada 95-96 contra un mítico Necaxa con piezas de selección nacional mexicana como Luis “El Matador” Hernández, Alberto García Aspe y Ricardo Peláez.
El volante español dotó de competitividad al Celaya, que no estaba acostumbrado a ganar y que se coló a la fiesta grande como invitado. El sueño terminó cuando Necaxa alzó el campeonato minutos después de que “El buitre” dejó escapar el gol del título tras una pelota parada. Butragueño estuvo dos años más en el país, aunque su influencia en el equipo descendió. Sin embargo, como buen líder, Emilio abrió las puertas para que más futbolistas españoles jugarán en el fútbol mexicano.
Iván Zamorano (América)
Era increíble que el centro delantero que en su momento fue titular con el Real Madrid y el Inter de Milán, Iván “Bam bam” Zamorano, se pusiera la playera del América en el año 2000. Aunque, según cuenta, fue tentado por el Boca Juniors de Bianchi, bicampeón de la Copa Libertadores.
“Cuando aparece Boca, por lo que significa, por la grandeza del club y por lo que significa a nivel sudamericano y mundial los quise escuchar. Me ofrecían un buen contrato y al terminar la reunión les dije que muchas gracias, pero tenía mi palabra para ir a jugar al América”, reveló para TUDN.
En 63 partidos, “Bam bam” ganó un título de liga contra Necaxa y marcó 33 goles en una etapa que el considera maravillosos por lo que vivió en el “Nido” del América.
“Estoy muy agradecido del América, del país en general y de todos los equipos que aparecieron en ese momento, pero elegir al América en ese momento no me equivoqué, llegué al equipo más grande de México y pasé dos años extraordinarios. El ‘Coco’ Basile, Manuel Lapuente, la gente del club, mis compañeros; fueron dos años maravillosos en que pudimos ser campeones y esos años los tengo siempre grabados en mi corazón”, agregó.
Claudio López (América)
“El piojo” López llegó procedente de la Lazio de Italia al América de México como un fichaje bomba en 2004. El argentino fichó por el club de Coapa siendo delantero de su selección y tras un buen paso en la Serie A y en La Liga cuando fue atacante del Valencia. Un gran factor para que se diera su fichaje fue que el campeón del mundo, Oscar Ruggeri, era entrenador del equipo y compatriota del “Piojo”.
Claudio levantó el décimo título de las Águilas en 2005, ya con Mario Carrillo como entrenador y con compañeros de alta categoría como Cuauhtémoc Blanco, Germán Villa, Pavel Pardo y un joven Guillermo Ochoa. Tecos fue la víctima en esa final en el estadio Azteca.
López permaneció dos años más allí con 27 goles en 87 encuentros, antes de regresar a Argentina con Racing y explorar los terrenos de la Major League Soccer (MLS) con Kansas City Wizards y Colorado Rapids.
André Pierre Gignac (Tigres)
El francés llegó gratis desde el Marsella para sacudir el fútbol en México y comandar un proyecto ambicioso con los Tigres de la Universidad Autónoma de Nuevo León. En 220 partidos registra 126 goles y 32 asistencias, de acuerdo a cifras de Transfermarkt.
Con 34 años, ha levantado el trofeo mexicano en cuatro ocasiones de cinco posibles. Una ante Pumas, otra contra América, ante su máximo rival Monterrey y finalmente contra León. Aunque la herida de perder la Copa Libertadores contra River Plate queda ahí, lo que pudo encumbrar ese proyecto.
“Gignac fue una coincidencia de andar buscando y de él porque estaba por terminar su contrato. Fueron meses de él informándose de la ciudad, de informarse con gente que lo representaba, y de no querer ir a otros países donde le ofrecían un buen contrato”, contó para Mediotiempo, el expresidente del club, Alejandro Rodríguez.