El número 1 del draft, Zion Williamson, apunta a hacer cosas increíbles en la NBA. Pero quizás sea demasiado pedirle estar a la altura de jugadores de leyenda como Jordan, Bryant o LeBron.
Zion Williamson desembarca esta temporada 2019/20 en la NBA como número 1 del draft y fenómeno universitario más monstruoso desde LeBron James. Los focos le colocan como el próximo gran dominador del baloncesto norteamericano. ¿Alcanzará dicho objetivo?
A sus 19 años recién cumplidos, el de Salisbury llega como referente en una franquicia que, precisamente. acaba de dejar marchar a su principal estrella de los últimos cursos. Una estrella que, además jugaba también en la misma posición de ala-pívot. Por lo tanto, parece que en los New Orleans Pelicans encontrará el lugar idóneo para superar sus miedos y poder crecer en sus primeras campañas, y reunir así la confianza necesaria como para desplegar todo su potencial baloncestístico, que aparentemente es mucho.
Aunque hay alguna duda sobre su físico, Más en lo referente al peso que pueda alcanzar y por lo tanto a su agilidad sobre la pista, una de sus principales cualidades es su potencia. Si es capaz de cuidarse y mantenerse en forma con el paso del tiempo, habrá pocos jugadores que puedan con él en toda la liga.
Los Pelicans le permitirán crecer y convertirse en un líder
Una de los factores más importantes es que los focos no se centren al principio demasiado en él. A pesar de que como ya demostró en su paso por la universidad, esa presión no le pesa. Además, si de verdad quiere aspirar a ser uno de los mejores jugadores de la historia en la NBA, tendrá que saber acallar las críticas con un juego regular que se lo permita.
Ya en esta primera campaña la exigencia será máxima, ya que los Pelicans jugarán en una Conferencia Oeste plagada de estrellas. Además de en una División Suroeste que comparten con Houston Rockets, San Antonio Spurs o Dallas Mavericks. Equipos que a priori se sitúan por encima de los de Nueva Orleans.
De ahí que el objetivo global para Zion pueda ser el de conducir a la franquicia de Luisiana a los playoffs, algo que sin duda sería una meta prodigiosa. Mientras tanto, a nivel personal debe intentar cumplir con las apuestas de la NBA que le dan como principal candidato para ganar el debutante del año en Betway. A 13 de septiembre, cuenta con una cuota de 1,65 por hacerse con dicho reconocimiento. Realmente todo apunta a que así será, sobre todo porque hay una gran diferencia entre el resto de los novatos y él. Desde luego, está en una excelente posición para suceder al campeón del galardón en 2019, Luka Doncic.
A partir de aquí, a Williamson se le exigirá más y más conforme vayan pasando las campañas. Su desembarco en la NBA recuerda al de LeBron James, y eso no evitará las comparaciones entre ambos. También es importante el hecho de haber firmado un contrato de patrocinio muy importante con la marca Jordan de Nike. De ahí que, posiblemente en un par de años, si de verdad este jugador vale lo que dicen, se le vea compitiendo por el anillo.
Tendrá que esperar su turno para pelear por el anillo
Un punto a favor de que este jugador llegue a ser una estrella está en el hecho de que en esta campaña la NBA cuenta con una mayor alternancia que en las anteriores. Esto facilita la inclusión de nuevos futuros vencedores. Con el posible fin a la dinastía de los Golden State Warriors, se abre una era en la que varias franquicias amenazan con ser los próximos campeones. LeBron James busca su cuarto anillo en Los Ángeles Lakers. Kevin Durant demostrar que fue el jugador más determinante de Oakland en los Brooklyn Nets. Giannis Antetokounmpo se quiere coronar en los Milwaukee Bucks. Mientras que Kawhi Leonard, de vuelta al salvaje Oeste, tratará de liderar otra vez al campeón. Un reto que cumplirá esta vez con Los Ángeles Clippers.
Ante esta gran expectación de grandes campeones y estrellas emergentes en la NBA, Williamson tendrá que hacerse un nombre y demostrar que las especulaciones son ciertas. Acabando y jubilando a varios de ellos. Sin duda, parece un buen momento como para intentarlo, aunque no será tarea sencilla. Y menos para un joven que a sus 19 años aún tiene mucho camino que recorrer para estar a la altura de los mejores.