Hoy analizamos cómo juega Mikal Bridges, escolta que ha rendido a un nivel increíble en su año junior (tercera temporada) en la NCAA.
Cómo juega Mikal Bridges
Este jugador de 21 años puede convertirse en un gran 3+D gracias a su buen físico. Sus 201 cm de estatura y 213 cm de envergadura le ayudan a poder desenvolverse en las posiciones de 2 y de 3. Además, ha demostrado ser muy hábil y rápido. Su superioridad atlética le sirve para ser muy incómodo en defensa, aspecto en el que tiene un gran potencial. Prefiere mantenerse encima del defensor, tanto con balón como sin él, que buscar el robo. A pesar de ello, hurta 1,6 pelotas por encuentro. Defiende muy bien las líneas de pase y es un enorme taponador para su posición (1,1 tapones por partido).
Durante sus tres temporadas en Villanova, ha pasado de ser un especialista defensivo a uno de los mejores tiradores de la competición. Acierta un 44,2% de sus triples intentando seis por encuentro. Coloca muy bien los pies y tira realmente rápido. Su rango es muy amplio y, lo más importante, es muy consistente. Además, la gran envergadura que posee le convierte en un jugador muy difícil de taponar. Desde su primer año en la NCAA ha sido muy eficiente, anotando más de un 50% de sus tiros de campo en las tres temporadas que ha disputado. Es un gran lanzador de tiros libres (84,9% durante este curso).
Con toda seguridad, Bridges es el mejor two way player(jugador con gran rendimiento en ambos lados de la cancha) del próximo Draft. También será uno de los más preparados para dar el salto a la mejor liga del planeta. Ha mejorado mucho con respecto al curso 2016/2017. Ha pasado de ser un importante jugador de rol poco anotador a uno de los mejores activos de la competición universitaria. Por último, cabe destacar su fiabilidad en los finales igualados y en la toma de decisiones.
Los puntos débiles de Mikal Bridges
A pesar de su tamaño y capacidad atlética, el escolta de los Wildcats carece de mucha fuerza. Su poca corpulencia provoca que no ataque el aro con asiduidad. Ha trabajado para aumentar su masa muscular, sin embargo, pesa 95 kg a cinco meses de cumplir 22 años. Unos kilos más le podrían ser de gran ayuda para jugar más físico en ambos lados de la pista. Además, podría aprovechar su buena muñeca desde el tiro libre al penetrar más hacia el aro y, por lo tanto, recibir más faltas.
Uno de los aspectos que más necesita mejorar este jugador nacido en Malvern (Pensilvania) es su ataque en uno contra uno. No ha tenido la oportunidad de jugar muchos aclarados a lo largo de su carrera en la NCAA y le ha perjudicado en este aspecto. La mayoría de sus tiros son tras asistencia o después de dar pocos botes. En definitiva, no es capaz de crearse sus propios lanzamientos.
El próximo 30 de agosto cumplirá 22 años. Es lo suficiente maduro para dar el salto a la NBA. En cuanto a nivel actual, es uno de los mejores jugadores que se van a presentar al Draft. Sin embargo, su potencial es mucho menor que la mayoría del resto de la camada. Además, hay aspectos como el salto vertical o el uso de la mano izquierda en los que tiene mucho que mejorar. Por último, no es muy ingenioso a la hora de leer e interpretar el juego.
El futuro de Mikal Bridges en la NBA
Con toda seguridad, Mikal Bridges es una apuesta segura a corto plazo. Sabe lo que es ganar un campeonato universitario como freshman y ha experimentado una mejora increíble desde aquel año hasta hoy. Además, su fiabilidad y eficacia en ambos lados de la cancha pueden llamar la atención de general managers que tengan puestos interrogantes en jugadores más jóvenes de esta camada.
Bridges ya tiene mucho trabajo hecho y, si sigue con esta progresión, puede convertirse en un factor diferencial para cualquier franquicia de la NBA.
Estadísticas de Mikal Bridges
Su primera temporada con Phoenix Suns se ha saldado con:
- 82 partidos.
- 29.5 minutos.
- 8.3 puntos.
- 3.2 rebotes.
- 2.1 asistencias.
